Lógicamente me hizo ilusión porque fue una etapa de mi vida que entrené a varios equipos con connotaciones, siempre, medio vecinales.
Vieron, un poco, mi historial, que tuve que pasar un selectivo y luego ir a Sevilla y fue una cosa, un poco… bueno que me costó un sacrificio pero que luego me recompensó.
Mi trayectoria en los equipos ha sido normal. Las directivas no me han echado nunca de ningún equipo.
Son una serie de circunstancias que te das cuenta ahora de mayor y no deja de ser un buen palmarés viendo, un poco, como está el fútbol ahora que los entrenadores no duran nada.
Estas cosas, cuando uno se hace mayor y las ve con una perspectiva, dan cierta ilusión.